Nuestra embarcación en la mayoría de casos representa un esfuerzo  considerable en nuestra economía aparte de la ilusión y todas las horas  que le vamos a dedicar a nuestra pasión.

Por eso es muy importante tener en cuenta el coste de la prima. Más  coberturas no significa que estemos contratando el mejor seguro náutico.
Existe en el mercado una guerra de precios a través de comparadores o  simuladores de seguros, algunos ofrecen precios muy competitivos, ya sea en un seguro básico o a todo riesgo.

Pero no solo es necesario fijarse en las coberturas sino también en  los límites de las indemnizaciones. Por ejemplo cuando se contrata un  seguro con la cobertura de daños propios, tendremos que verificar si  dentro de las condiciones generales la reposición de elementos dañados  es a valor de “nuevo”, es decir no se aplica depreciación por antigüedad.

Y esto, sólo está especificado en las condiciones generales de la  póliza, de allí que no es posible comparar distintas cotizaciones de  seguros únicamente con un simple presupuesto.

Se aconseja leer el condicionado, porque así podremos saber lo que tenemos cubierto y lo que no está cubierto.
En el caso de embarcaciones a vela, algunas aseguradoras excluyen la  rotura de los mástiles, otras sólo pagan las 2/3 partes del valor del  mismo.

Por tanto, el precio final de la póliza de nuestro barco vendrá  determinado por varios factores. Algunos los podemos escoger, como las  coberturas que ya hemos mencionado, mientras que otros vienen fijados  por las características propias de nuestra embarcación, como año de  construcción , listado de elementos, el uso al que se destina, etcétera.

En AXA, la reposición de elementos dañados se realiza a valor de “nuevo”, es decir no se aplica depreciación por antigüedad.

Te recomendamos que, antes de comenzar a buscar, dediques tiempo a valorar cuál es el mejor seguro para tu barco.

Y si sigues teniendo dudas, ponte en contacto con nosotros y te asesoraremos sin ningún compromiso.